Tenerife jóvenes1Unos 800 jóvenes procedentes de muchos rincones de la Diócesis de Tenerife, incluidas las islas de La Palma y El Hierro, participaron  el pasado sábado en el municipio de Güímar en el anual Encuentro Diocesano de jóvenes bajo el lema “Bienaventurados”.

Después de la acogida realizada en la plaza de S. Pedro, se proclamó el evangelio de las Bienaventuranzas para que, repartidos en grupos, los participantes tuvieran la oportunidad de trabajarlas a través de ocho talleres. A su vez, cada taller tuvo asignada una tarea para la celebración de la Eucaristía.

El Obispo diocesano Mons. Bernando Álvarez Afonso presidió la misma sobre las trece horas en el templo de S. Pedro, centrando su homilía en el lema de la jornada. Mons. Bernardo Álvarez reflexionó a la luz de la Palabra proclamada sobre el camino de la felicidad y la alegría.

El almuerzo fraterno dio paso al tiempo lúdico en el que un grupo de jóvenes del norte de Tenerife hizo una representación. El encuentro concluyó en la parroquia de Santo Domingo con una oración comunitaria con Jesús Eucaristía.  

 

Fuente:: SIC

Leer mas http://www.agenciasic.com/2013/11/11/800-jovenes-participan-en-el-encuentro-bienaventurados-de-la-diocesis-de-san-cristobal-de-la-laguna/

Fallece el cardenal Domenico Bartolucci
(RV).- Falleció este lunes, en Roma, en torno a las 8 de la mañana, a la edad de 96 años, el cardenal Domenico Bartolucci. Durante muchos años fue director de la Capilla Musical Pontificia Sixtina. Fue creado cardenal por el Papa Benedicto XVI en el Consistorio del 20 de noviembre de 2010, de la Diaconía de los Santos Nombres de Jesús María, en via Lata.
Con la muerte del cardenal Bartolucci, el colegio cardenalicio queda formado por 200 purpurados de los cuales 109 cardenales electores y 91 no electores, por tener más de 80 años.
ER RV

Fuente:: News.va

Leer mas http://www.news.va/es/news/fallece-el-cardenal-domenico-bartolucci

Ávila obispo avila centenario santa teresaEn el transcurso de la rueda de prensa celebrado en el Obispado de Ávila el pasado viernes 8 de noviembre, en la que se presentó la misión diocesana que se llevará a cabo con motivo del V Centenario de Santa Teresa, también hubo tiempo para otras cuestiones. Llegado el turno de preguntas, los periodistas quisieron saber si la diócesis de Ávila había recibido el cuestionario que el Papa Francisco había anunciado para conocer la situación de la familia en la sociedad actual.
 
Mons. García Burillo afirmó que dicho cuestionario ya había llegado a la diócesis, y que se encuentra en fase de análisis. El Obispo cree que ha llegado el momento de defender a la familia cristiana, que, según considera, se encuentra en “situación de precariedad” desde los últimos años en España y en otros países debido a una serie de iniciativas legislativas que a su juicio la han perjudicado.
 
Para ello, este cuestionario servirá para conocer el estado actual de la familia y ayudar a situarla ante la sociedad como un modelo”, ha argumentado el Obispo de Ávila, quien también lamentaba que en los últimos años se hayan adoptado iniciativas legislativas en España y en otros países que han hecho que la familia haya quedado en una débil situación.
 
Aunque no ha tenido tiempo de analizar en profundidad el cuestionario remitido desde el Vaticano, Mons. García Burillo ha anunciado que se invitará a las parroquias y a la delegación diocesana de Pastoral Familiar para que puedan trabajar sobre el mismo. Porque, según él mismo afirmó, “es el momento para hacer una defensa de la familia cristiana”.

Fuente:: SIC

Leer mas http://www.agenciasic.com/2013/11/11/mons-garcia-burillo-es-el-momento-para-hacer-una-defensa-de-la-familia-cristiana/

No a los cristianos de doble vida, pide el Papa en su homilía
(RV).- (Con audio) No a los cristianos de doble vida, pide el Papa en su homilía El que no se arrepiente y “simula ser cristiano” hace tanto mal a la Iglesia. Es cuanto afirmó el Papa Francisco en la Misa de esta mañana celebrada en la capilla de la Casa de Santa Marta.
El Papa reafirmó que todos debemos decirnos “pecadores”, pero debemos estar atentos a no convertirnos en “corruptos”. Quien es benefactor de la Iglesia pero roba al Estado, añadió Francisco, es “un injusto” que conduce una “doble vida”.
Jesús “no se cansa de perdonar y nos aconseja” que hagamos lo mismo. El Papa se detuvo en su homilía sobre la exhortación del Señor a perdonar al hermano arrepentido, del que habla el Evangelio. Cuando Jesús pide que se perdone siete veces al día, observó el Obispo de Roma, “hace un retrato de sí mismo”. Jesús, prosiguió, “perdona” pero en este pasaje evangélico también dice: “Atención a quien causa escándalos”. No habla de pecado, sino de escándalo, que es otra cosa. Y añade que “es mejor para él que se le ponga una piedra de molino al cuello y se lo arroje al mar, antes de que escandalice a uno de estos pequeños”. De ahí que el Papa se preguntara qué diferencia hay entre “pecar y escandalizar”:
“La diferencia es que quien peca y se arrepiente, pide perdón, se siente débil, se siente hijo de Dios, se humilla, y pide precisamente la salvación de Jesús. Pero de aquel otro que escandaliza, ¿qué cosa escandaliza? Que no se arrepiente. Sigue pecando, pero finge ser cristiano: la doble vida. Y la doble vida de un cristiano hace tanto mal, tanto mal. ‘¡Pero, yo soy un benefactor de la Iglesia! Meto la mano en el bolsillo y doy a la Iglesia. Pero con la otra mano, roba: al Estado, a los pobres… roba. Es un injusto. Ésta es doble vida. Y esto merece – lo dice Jesús, no lo digo yo – que le pongan en el cuello una muela de molino y sea arrojado al mar. No habla de perdón, aquí”.

Y esto, subrayó el Pontífice, porque “esta persona engaña”, y “donde está el engaño, no está el Espíritu de Dios. Ésta es la diferencia entre pecador y corrupto”. Quien “conduce una doble vida – dijo – es un corrupto”. Diverso es quien “peca y quisiera no pecar, pero es débil” y “va a lo del Señor” y pide perdón: “¡a ese el Señor lo quiere! Lo acompaña, y está con él”:
“Y nosotros debemos decirnos pecadores, sí, ¡todos, aquí, eh!, todos lo somos. Corruptos, no. El corrupto está fijo en un estado de suficiencia, no sabe qué cosa es la humildad. Jesús, a estos corruptos, les decía: ‘La belleza de ser sepulcros blanqueados, que parecen bellos, por afuera, pero dentro están llenos de huesos muertos y de putrefacción. Y un cristiano que se vanagloria de ser cristiano, pero que no hace vida de cristiano, es uno de estos corruptos. […] Todos conocemos a alguien que está en esta situación, ¡y cuánto mal hacen a la Iglesia! Cristianos corruptos, sacerdotes corruptos… ¡Cuánto mal hace a la Iglesia! Porque no viven en el espíritu del Evangelio, sino en el espíritu de la mundanidad”.

El Santo Padre recordó que San Pablo lo dice claramente en su Carta a los cristianos de Roma: “No se uniformen a este mundo”. Es más, precisó, el “texto original es más fuerte” porque afirma que no hay que “entrar en los esquemas de este mundo, en los parámetros de este mundo”. Esquemas, reafirmó, que “son esta mundanidad que te lleva a la doble vida”:
“Una podredumbre barnizada: ésta es la vida del corrupto. Y Jesús no les decía sencillamente ‘pecadores’ a estos, les decía: ‘hipócritas’. Y qué bello, aquel otro, ¿no? ‘Si cometiera una culpa siete veces al días contra ti y siete veces viniera a ti diciendo: ‘Estoy arrepentido, soy pecador’, tu lo perdonarás’. Es lo que Él hace con los pecadores. Él no se cansa de perdonar, sólo con la condición de no querer hacer esta doble vida, de ir a Él arrepentidos: ‘¡Perdóname, Señor, soy pecador!’. ‘Pero, vas adelante, vas adelante: yo lo sé’. Y así es el Señor. Pidamos hoy la gracia al Espíritu Santo que huye de todo engaño, pidamos la gracia de reconocernos pecadores: somos pecadores. Pecadores, sí. Corruptos, no”.

(María Fernanda Bernasconi – RV).

Fuente:: News.va

Leer mas http://www.news.va/es/news/no-a-los-cristianos-de-doble-vida-pide-el-papa-en

Mons. Braulio Rodríguez PlazaMons. Braulio Rodríguez   Sabemos que en la Iglesia catolicidad y unidad van juntas. Estas dos dimensiones de la fe en la Iglesia se hacen visibles en las figuras de san Pedro y San Pablo, distintos entre ellos pero en unidad de fe. Así está indicada otra característica de la Iglesia: ella es apostólica. ¿Qué significa? Sencillamente que el Señor instituyó doce apóstoles, como eran doce los hijos de Jacob, señalándoles de esta manera como iniciadores del Pueblo de Dios, el cual, siendo ya universal, en adelante abarca a todos los pueblos.

San Marcos nos dice que Jesús llamó a los Apóstoles para que “estuvieran con Él y también para enviarlos” (Mc 3,14). Es cierto, lo que dice san Marcos parece una contradicción, pues nosotros diríamos: o están con Jesús o son enviados y se ponen en camino, alejándose de Él. Pero, san Gregorio Magno, en un texto acerca de los ángeles, nos puede ayudar a aclarar esta aparente contradicción. Dice este Papa que los ángeles son siempre enviados y, al mismo tiempo, están siempre en presencia de Dios, y continúa: “Dondequiera que sean enviados, dondequiera que vayan, caminan siempre en presencia de Dios” (Homilía 34,13). Y el Apocalipsis se refiere a los obispos como “ángeles” de su Iglesia; de manera que podemos hacer esta aplicación: los Apóstoles y sus sucesores deberían estar siempre en presencia del Señor y precisamente así, dondequiera que vayan, estarán siempre en comunión con Él y vivirán de esa comunión.

La Iglesia es también apostólica porque confiesa la fe de los Apóstoles y trata de vivirla. La fe no se la inventan los Apóstoles: viene de Cristo, pero hay una unidad que caracteriza a los Doce llamados por el Señor; igualmente existe una continuidad en la misión apostólica. San Pedro, en su primera Carta, se refiere a sí mismo como “co-presbítero” con los presbíteros a los que escribe (cf. 1 Pe 5,1). Es decir, el mismo ministerio que él había recibido del Señor prosigue ahora en la Iglesia gracias a la ordenación sacerdotal; es lo que se llama “sucesión apostólica”. La palabra de Dios no sólo escrita; gracias a los testigos que el Señor, por el sacramento del Orden, insertó en el ministerio apostólico, sigue siendo palabra viva.

Ahora entendemos que con la unidad, al igual que con la apostolicidad, está unido y relacionado el servicio del sucesor de san Pedro, que reúne visiblemente a la Iglesia de todas las partes y de todos los tiempos, impidiéndonos de este modo a cada uno de nosotros caer en falsas autonomías, que con facilidad se transforman en particularizaciones de la Iglesia que pueden poner en peligro su independencia. No queremos olvidar que el sentido de todos los ministerios y funciones en la Iglesia es que “lleguemos todos a la unidad de la fe y en el conocimiento del Hijo de Dios, al hombre perfecto” (Ef 4,13).

Pero hablamos también de que la Iglesia es santa. Recordemos lo que confiesa san Pedro en nombre de los Doce: “Nosotros creemos y sabemos que tú eres el Santo de Dios”. ¿Qué quiere decir esta afirmación? Sencillamente que la Iglesia no es santa por sí misma, pues está compuesta de pecadores, como sabemos y vemos todos. Más bien, siempre es santificada de nuevo por el Santo de Dios, Jesucristo, por su amor purificador. Y es que Dios no sólo ha hablado; además, nos ha amado hasta la muerte de su propio Hijo. He aquí lo más grande que nos ha sucedido, de modo que cada uno de los cristianos puede decir personalmente, con san Pablo: “Yo vivo en la fe del Hijo de Dios, que me amó y se entregó por mí” (Gal 2,20).

X Braulio Rodríguez Plaza

Arzobispo de Toledo

Primado de España

Fuente:: Mons. Braulio Rodríguez

Leer mas http://www.agenciasic.com/2013/11/11/la-alegria-de-la-fe-la-iglesia-iii/

Un diálogo de JesúsMons. Jaume Pujol    Son muchos los diálogos de Jesús referidos por el Evangelio. Albino Luciani, luego Juan Pablo I, hizo la cuenta y le salían 86: de ellos, 37 con los discípulos, 22 con gentes del pueblo y 27 con sus adversarios.

Puede llamar la atención que el Señor empleara tanto esfuerzo en hablar con quienes los tenía en contra. La explicación es que él no despreciaba a nadie. Uno de estos últimos diálogos –a él quiero referirme hoy- lo tuvo con Pilato. En realidad el procurador romano no tenía nada contra aquel detenido, y así lo dice claramente, aunque por una cuestión de debilidad personal y egoísmo práctico acabe cediendo a las presiones y mande azotarle primero y luego crucificarle. El diálogo con Pilato se centra en la acusación con la que le llevaron a su presencia: arrogarse la condición de rey de los judíos. Por ello le pregunta: “Conque ¿tú eres rey?”. Él responde: “Tú lo dices, soy rey. Yo para esto he nacido y para esto he venido al mundo, para ser testigo de la verdad”. Ya antes había dicho: “Mi reino no es de este mundo. Si fuera así mi guardia habría luchado para que no cayera en manos de los judíos. Pero mi reino no es de aquí”.

Esta escena, relatada por san Juan, nos indica muy bien el sentido de la fiesta de Cristo Rey que celebramos este domingo. Es un título que algunos creen hoy que es poco adecuado; no les gusta que se hable de la realeza de Cristo, quizá porque les ocurre como a Pilato, no la distinguen de otras realezas humanas apegadas al poder, a las posesiones, a mandar sobre los demás.

Jesús lo dejó muy claro y así lo entiende la Iglesia. Es un rey que se hace el último de todos por amor; un rey que se ciñe una toalla y lava los pies de sus acompañantes; un rey que no envía a sus súbditos a la guerra y a la muerte, sino que es capaz de morir él para salvar a otros.

Benedicto XVI, en su biografía “Jesús de Nazaret”, repara en una frase de este diálogo del Señor con aquel jefe político, aquella en la que le dice que ha venido a dar testimonio de la verdad, ante la cual Pilato reacciona preguntando como con despecho: “¿Qué es la verdad?”. Es la misma pregunta que ahora se hacen muchos escépticos. Creen que la verdad no existe, lo que existe son opiniones. Si acaso la admiten en el campo de las ciencias, pero no en el de la trascendencia.

Pilato no comprendió que la Verdad, con mayúsculas, la tenía delante. Es lo que nos pasa a nosotros también en muchas ocasiones. No nos damos cuenta de la presencia de Dios, un Dios amoroso, un rey-servidor, en nuestras vidas. Sin embargo, es el que da sentido a nuestra existencia y la respuesta a las grandes preguntas sobre el porqué de la vida que se hace cada generación. Fuera de él, ¿dónde encontraremos palabras de vida eterna?

+ Jaume Pujol Bacells

Arzobispo de Tarragona y primado

Fuente:: Mons. Jaume Pujol

Leer mas http://www.agenciasic.com/2013/11/11/un-dialogo-de-jesus/

Mons. Juan José OmellaMons. Juan José Omella    El pasado 13 de octubre, la Iglesia en España veía incrementado el número de sus hijos mártires beatificados, de los que como madre se siente santamente orgullosa.

Nuestra diócesis quiere celebrar solemnemente el testimonio cristiano de sus mejores hijos. Para ello, hoy, 10 de noviembre, a las 8 de la tarde, en la Catedral de Santa María de la Redonda, de Logroño, tendrá lugar una misa de acción de gracias por todos los mártires riojanos del siglo XX en España que han sido beatificados.
Todos los diocesanos quedáis invitados a participar en la eucaristía, a seguir estrechando el abrazo de comunión entre todos, a retomar con alegría el relevo del testimonio evangélico, para que la presencia de Cristo Resucitado siga iluminando nuestra sociedad y nuestra tierra.

¿Cabe un gozo mayor para la Iglesia Diocesana que el de celebrar juntos el vigoroso testimonio de amor al Padre, de unión fraterna con el Hijo, de comunión en el Espíritu, de estos hermanos nuestros en la fe y en el amor cristiano?

¿Cabe un testimonio más pleno de humanidad, de hermandad sin condiciones ni fronteras, que el de estos testigos del Dios vivo, entrañable y familiar?

¿Qué forma de vivir hay más hermosa que la de dar la vida? ¿Qué forma de morir hay más fecunda que la de despedirse pidiendo a Dios perdón y perdonando de corazón al asesino propio?

El mártir transparenta al mismo Cristo. Deja que sea Él quien hable, actúe, ore, consuele. No tiene otra finalidad que la de Cristo ni otro porqué su obrar que el del Maestro. No tiene otra ambición que la de transformarse en Él, otro alimento que el de honrar al Padre, otra misión que la de proclamar la Buena Nueva e ir forjando en la tierra el Reino de los Cielos.

Su ser, como su obrar, es el de Cristo.

Vivían, trabajaban, en parroquias, colegios, residencias, centros de Acción Católica. Oraban, educaban, dedicaban su vida a la atención de los más pobres, a cuidar la salud de los enfermos.

Su norma era el Decálogo y su espíritu el de las Bienaventuranzas. Eran tan ejemplares ciudadanos como buenos cristianos, prestos siempre a dar al César lo del César y a Dios lo que es de Dios. No hubo en su comportamiento otro delito que el de ser sus testigos.

Su lista ha ido nutriéndose con el paso del tiempo, su luz sigue alumbrando nuestra época:
Beato Germán de Jesús y María, natural de Cornago, pasionista, beatificado el 1 de octubre de 1989; Beato Leoncio Pérez Ramos, natural de Muro de Aguas, claretiano, beatificado el 25 de octubre de 1992; Beato Jesús Hita Miranda, natural de Calahorra, marianista, beatificado el 1 de octubre de 1995; Beato Julián Moreno Moreno, natural de Alfaro, agustino recoleto, beatificado el 7 de marzo de 1999; Beato Tirso Manrique Melero, natural de Alfaro, dominico, beatificado el 11 de marzo de 2001;Beato Narciso Esténaga Echeverría, natural de Logroño, obispo de Ciudad Real, beatificado el 28 de octubre de 2007; Beato Francisco del Valle Villar, natural de Grañón, hermano de las Escuelas cristianas, beatificado el 28 de octubre de 2002; Beato José Grijalva Medel, natural de Calahorra, carmelita, beatificado el 28 de octubre de 2007; Beato Manuel Moreno Martínez, dominico, natural de Rincón de Soto, beatificado el 28 de octubre de 2007; Beato Pedro Jiménez Vallejo, carmelita descalzo, natural de Valdeprado (Soria), párroco de Pradejón, beatificado el 28 de octubre de 2007.

El pasado día13 de octubre eran beatificados los mártires Gonzalo Barrón Nanclares, (SS.CC.), natural de Ollauri; Felipe González de Heredia Barahona(C.M.F.), natural de San Asensio; Luis Gonzaga Alesanco Maestro,(O.S.B.), natural de san Millán de la Cogolla; Clemente Faustino Fernández Sáenz,(F.S.C.), natural de Logroño.

Laicos, sacerdotes, religiosos y religiosas, todos fueron sembrándose como el grano que cae en tierra y muere. Su copiosa cosecha, su sazonado fruto, siguen alimentándonos.

No vestían otro atuendo que su fe, no portaban más armas que el amor y la esperanza cristianas. La fuerza del Espíritu sostuvo su flaqueza. Murieron como habían vivido: bendiciendo. Ellos son el honor de nuestra Iglesia, la luz de nuestro Pueblo.

Nuestra acción de gracias por ellos se extiende también a sus familias y comunidades religiosas, donde convivieron y se formaron.

Nos encomendamos a María, Madre de Dios y Madre nuestra. A ella, que sabe cómo nadie acompañarnos y fortalecernos en la fe, la esperanza y el amor, a lo largo de toda nuestra vida.

Con mi afecto y bendición,
+Juan José Omella Omella
Obispo de Calahorra y La Calzada-Logroño

Fuente:: Mons. Juan José Omella

Leer mas http://www.agenciasic.com/2013/11/11/nuestra-iglesia-diocesana-esta-de-fiesta/

Una respuesta existencialMons. Ciriaco Benavente Mateos     Noviembre es el mes de los difuntos. La visita a los cementerios hace aflorar, con las oraciones y los recuerdos, olas de melancolía, preguntas serias, las más serias e insoslayables de cuantas el hombre puede plantarse. “El hombre es un animal que soporta dudas” dijo el gran Newman. Y, a cada paso, vuelven los interrogantes, sobre todo cuando nos encontramos con el aparente sinsentido de muertes prematuras: ¿Será cierto que la vida carece de sentido y que todo conduce a la nada? ¿Será verdad que el hombre es una pasión inútil, como afirmó Sartre?

Todas las grandes civilizaciones, sin excepción, han cultivado, escuchando la voz del corazón, alguna forma de supervivencia; han rendido algún tipo de culto a los muertos. Hoy, en Occidente, el materialismo parece ganar la batalla al espíritu. Aumenta el número de los que niegan cualquier forma de supervivencia. También en tiempo de Jesús, un grupo religioso, el más conservador entre los judíos, negaban la resurrección.

Los tres evangelios sinópticos nos cuentan el episodio, que escucharemos en la misas de este domingo, situándolo en los últimos días de la vida terrestre de Jesús y en un contexto de diatribas y asechanzas. Ello dio ocasión a Jesús para expresar su visión sobre “el más allá”, no como un debate, sino como una respuesta existencial.

El deseo de supervivencia había llevado a los judíos a imponer la costumbre del “levirato”: Si el esposo moría sin dejar descendencia, el pariente más próximo tenía la obligación de darle descendencia a la mujer viuda, a fin de asegurar al muerto la supervivencia en los hijos, que se consideraban descendientes del difunto.

Para ridiculizar la fe en la resurrección, los Saduceos le pusieron a Jesús una trampa grotesca, una trampa saducea: “Había siete hermanos; el primero se casó y murió sin descendencia; los siguientes hermanos se fueron desposando, uno tras otro, con la viuda sin que ninguno de ellos dejara descendencia. Finalmente murió la mujer. A la hora de la resurrección, ¿de quién de ellos será esposa, pues los siete la tuvieron por mujer? Parece que los saduceos entendían la resurrección como una simple prolongación de la vida terrestre que aquí conocemos.

Jesús, al responder, nos invita a desistir de imaginar la vida futura desde nuestros pesos y medidas actuales. ¿Cómo podríamos explicar a un niño, que todavía está en el seno de su madre, la vida que le espera? Incluso en el caso de que conociera la lengua, nuestras palabras no le dirían nada hasta tanto tuviera alguna experiencia de nuestro mundo. La mariposa es distinta de la oruga de la que procede, como la espiga es distinta del grano de trigo. Cuánta diferencia entre la anciana de noventa años y la niña que era al comienzo de su vida. Si, incluso en estos hechos que acontecen dentro del tiempo, existen tales diferencias, cuánta más existirá entre el tiempo de los hombres y la eternidad de Dios. Eso sí, la diferencia no anula ni niega la continuidad del ser. La oruga vive arrastrándose, a ras del suelo; un buen día se duerme en el capullo que le sirve de mortaja, y he aquí que otro día despierta ella misma convertida en una bella mariposa capaz de volar entre las flores. Seguro que si hubiera sido consciente de la vida que le esperaba, todo su ser habría clamado por ser lo que estaba llamada a ser.

“Ellos son semejantes a los ángeles. Son hijos de Dios, siendo herederos de la resurrección…”. Es como si Jesús dijera: Se trata de algo mucho más hermoso de lo que podéis imaginar.

La respuesta de Jesús me recuerda la afirmación vigorosa y esperanzada de san Pablo: “Los sufrimientos de ahora no tienen comparación con la gloria que un día se nos descubrirá; por eso, la creación entera aspira a ser liberada de la corrupción para entrar en la libertad gloriosa de los hijos de Dios” (Rom. 8,19-21). La vida “del más allá” es inimaginable, distinta de la de aquí, porque es una participación, ya sin la oscuridad de la fe, en la vida del totalmente Otro, de Dios. Y, como todo lo tocante a Dios, nos es imposible conceptualizarlo racionalmente de modo adecuado. Nuestra posibilidad, nuestra grandeza y nuestro riesgo, es la de creer, fiándonos de Jesús, o la de no creer.

Qué admirable el testimonio de madre de los Macabeos; viendo morir en un mismo día a sus siete hijos, víctimas de las torturas más horribles, les animaba con tanta ternura como fortaleza: “Yo no sé cómo aparecisteis en mi seno; yo no os regalé el aliento ni la vida, ni organicé los elementos de vuestro organismo. Fue el Creador del universo. Él, por su misericordia, os devolverá el aliento y la vida, si ahora os sacrificáis por su ley”.

Los santos, como los mártires, han sido esos hombres que se han sentido tan amados de Dios que han aceptado el riesgo de entregar su vida por Dios y por los demás, incluso hasta la muerte. Así hicieron suya la Pascua de Cristo, llamada a ser también Pascua de la nueva creación.

+  Ciriaco Benavente Mateos

Obispo de Albacete

Fuente:: Mons. Ciriaco Benavente Mateos

Leer mas http://www.agenciasic.com/2013/11/11/una-respuesta-existencial/

OMP filipinas TifonLos misioneros españoles que viven en Filipinas (unos 123) expresan su dolor por las consecuencias que el tifón Haiyán ha provocado a su paso por la región central de Filipinas. Los misioneros permanecen junto al pueblo, como lo hacen siempre ante las catástrofes, consolándolos, pero sobre todo, viviendo lo mismo que vive la gente en cada momento; ahora, un tifón de resultados devastadores.

La misionera Ana Mª Perea, hermana de Nuestra Señora de la Consolación, se encuentra en la zona centro de Filipinas, en la región de Cebú. Aunque han estado sin luz, no han sufrido esta vez las consecuencias más graves de Haiyán, pero asegura que quienes las han vivido “no despotrican contra Dios”, sino que en estos momentos “creen con más fuerza”.

Otra misionera que se encuentra en Manila, Lucía Retuerto, hermana de la Caridad de Santa Ana, manifiesta que las ayudas ya han comenzado a llegar y garantiza que las hechas a través de las Congregaciones religiosas llegan con seguridad a sus destinatarios.

El sacerdote Néstor Huenda, del Camino Neocatecumenal, que se encuentra en el norte del país, visitará en los próximos días la zona afectada para obtener información de primera mano, sobre el terreno, aunque sabe que en muchos sitios “No hay manera de entrar porque las calles están sembradas de cables, árboles caídos, etc.”.

Como siempre, los misioneros comentan que los más afectados son los pobres, que viven en sencillas casas de bambú que el viento destruye inevitablemente.

(OMP España)

Fuente:: SIC

Leer mas http://www.agenciasic.com/2013/11/11/misioneros-espanoles-con-el-pueblo-filipino/

Terrassa Plan Pastoral l2013El sábado día 9 de noviembre tuvo lugar en el Casal Borja de Sant Cugat la presentación del nuevo Plan pastoral diocesano La buena nueva del serviciopara el período 2013 a 2018.

Asistieron cerca de 300 personas entre sacerdotes, diáconos, religiosos y laicos de toda la diócesis, en su mayoría miembros de consejos pastorales, catequistas y responsables de actividades y movimientos e instituciones.

A las 11 de la mañana se inició la jornada, presidida por el Obispo die Terrassa Mons. Saiz Meneses, con la conferencia del Dr. Joan Planellas, vicedecano de la Facultad de Teología de Catalunya, que presentó la encíclica Lumen Fidei. Con un estilo académico y cercano, desgranó los elementos esenciales del documento pontificio. Se trata de la culminación de una trilogía iniciada por el Papa Benedicto XVI, que publicó las encíclicas Deus caritas est y Spe salvi, sobre la caridad y la esperanza. Como hilo conductor del texto señaló que la fe es un camino. Comentó cada uno de los cuatro capítulos de la encíclica. Del primero destacó que el amor de Dios es el objeto de nuestra fe, y que entonces la fe se convierte en la respuesta a ese amor que llega a su plenitud en Cristo. Del segundo apartado remarcó la necesidad del conocimiento de Dios, que es la Verdad, y  que se debe hacer desde la humildad. Del tercer capítulo subrayó la misión de la transmisión de la fe de persona a persona, por contacto. Y finalmente sobre el último insistió en la importancia de la familia como espacio para la transmisión de esta fe y la fraternidad y la vivencia de la caridad como significativos. Invitó finalmente a vivir la alegría de la fe como signo evidente de su grandeza.

En la segunda parte del encuentro tuvo lugar la presentación del nuevo plan pastoral diocesano, preparado con las aportaciones realizadas desde los diversos organismos diocesanos. El texto está inspirado en la carta Porta Fidei( 2011) y en la encíclica Lumen Fidei (2013 ) y ofrece un amplio abanico de acciones, distribuidas en tres bloques, bajo el denominador común del servicio. El primero tiene como título Reavivar la fe y profundizar en la formación, y a la vez está dividido en apartados en los que se destaca: la potenciación de la formación diocesana, el acompañamiento de las familias y la reflexión sobre la transmisión de la fe niños y jóvenes especialmente. El segundo bloque es El testimonio de la Caridad, y orienta el trabajo de la acción caritativa a nivel personal, comunitario y diocesano. Finalmente el tercer capítulo es La pastoral en clave de Nueva Evangelización, proponiendo la reflexión y estudio del mismo, la creación de grupos de animación evangelizadora y el trabajo de la comunión y la corresponsabilidad en todos los niveles. El texto, presentado de manera dinámica con el apoyo de nuevas tecnologías, fue presentado por Mons. Salvador Cristau, Obispo auxiliar, y los secretarios del Consejo Presbiteral y del Consejo Pastoral Diocesano.

La jornada con concluyó con las palabras de Mons. Saiz Meneses, invitando vivamente llevar a la práctica las acciones del nuevo plan pastoral, según la voluntad de Dios y nuestro trabajo

Fuente:: SIC

Leer mas http://www.agenciasic.com/2013/11/11/presentacion-del-nuevo-plan-pastoral-diocesano-de-terrassa-la-buena-nueva-del-servicio/