El buen pastor con el cordero sobre los hombros
(RV).- (audio) El buen pastor con el cordero sobre los hombros Han sido presentados al Papa Francisco, pasado el mediodía, en la Domus Santa Marthae, como es ya tradicional, los dos corderos bendecidos por la mañana con ocasión de la memoria litúrgica de Santa Inés, en la iglesia del mismo nombre de la Vía Nomentana. La lana de estos corderos será la que se utilizará para confeccionar los sagrados Palios que serán impuestos por el Papa a los nuevos arzobispos metropolitanos el próximo 29 de junio, durante la solemnidad de los Santos Pedro y Pablo.
El Palio es un ornamento litúrgico de honor y de jurisdicción del Papa y de los arzobispos metropolitanos en sus Iglesias y en las de su provincia. Consiste en una tira de lana blanca de unos cuatro dedos de ancha, hecha en forma de collar, guarnecida alrededor con seis cruces de seda negra y con dos cabos pendientes uno sobre la espalda y otro sobre el pecho del prelado, que rematan dos cruces negras con dos chapas de plomo en el interior para que tengan consistencia y se adapten al cuerpo. Representa el símbolo del Buen Pastor con el cordero sobre los hombros. El Santo Padre impone esta banda de lana blanca a los nuevos arzobispos metropolitanos en signo de su especial comunión con la Sede apostólica.
ER RV

Fuente:: News.va

Leer mas http://www.news.va/es/news/el-buen-pastor-con-el-cordero-sobre-los-hombros

Zamora 181Independientemente de la edad y de creencias religiosas, el Centro de Escucha San Camilo es un servicio que ofrece la Diócesis de Zamora para atender individual, familiar y grupalmente a personas con dificultades para afrontar el fallecimiento de algún ser querido.  

El responsable del centro es el delegado diocesano para la Familia y Defensa de la Vida, Florencio Gago. Bajo la dirección de este sacerdote se encuentran una psicóloga y un equipo de ocho colaboradores y voluntarios.

La metodología empleada se basa en el conocimiento de que los grupos de acompañamiento ofrecen el calor, la acogida y la escucha necesarios para movilizar las emociones del doliente, de forma que las libere por medio de la palabra y así pueda aceptar su pérdida y encajar el dolor en su vida. Por lo tanto el objetivo de los grupos no es olvidar el dolor o erradicarlo, sino asumirlo, situarlo en su lugar y aprender a vivir con él.

En el grupo de acompañamiento el doliente puede encontrar un ambiente de respeto, confidencialidad y comprensión que propicie la búsqueda de motivación para retomar las riendas de su vida. Todo ello canalizado por la orientación de una profesional especializada en el tema, que favorece la liberación de sentimientos para enfrentarse a ellos y a sus consecuencias.

El grupo de voluntarios realiza acompañamientos a personas que no se pueden desplazar o que solicitan un tipo de atención más personalizado.

El Centro de Escucha San Camilo comenzó a funcionar en el año 2008; desde entonces este servicio de la Iglesia diocesana ha atendido a 59 personas gratuitamente, de las cuales la mayoría han sido mujeres. De acuerdo con los datos que se desprenden de la memoria de actividad, la demanda en atención en duelo se incrementa a partir de los 30 años, llegando a su punto álgido en el tramo entre los 50 y 70 años, para a continuación decrecer ligeramente.

En lo relativo al tipo de duelo, predomina el producido por el fallecimiento de los hijos (47 %), seguido del debido a la pérdida del esposo (37 %), los padres (12 %), hermanos (3 %) y el duelo por separación causado por el divorcio (3 %).

La forma de contactar con el Centro es muy sencilla, ya que tiene los mismos datos que el Centro de Orientación Familiar (COF) diocesano: calle Diego de Losada 18, 2º derecha (Zamora), número de teléfono 980 511 065 y correo electrónico: cof@diocesisdezamora.es.

(Viky Esteban – Iglesia en Zamora)

Novedad en San Camilo: el reencuentro

(Por Sara Castro, psicóloga del Centro)

Los grupos de ayuda mutua cumplen diferentes funciones: ayudan a sentirse comprendido, a no sentirse solo en la lucha ni raro por lo que se experimenta, a fijarse en el ejemplo del compañero para retomar esperanzas para seguir viviendo e incluso para orientarse en el caminar… En definitiva, a sentirse acompañado cariñosamente, con respeto y sin ser juzgado en la dura tarea de elaborar el duelo. Es por ello que resulta inevitable que se creen unos lazos entre los componentes del grupo que se echen de menos cuando el mismo ha finalizado.

Debido a esta voluntad de reencontrarse con los viejos compañeros, para así poder compartir lágrimas de desahogo, risas y momentos vividos en el pasado o en la actualidad, surge este nuevo grupo. Se trata de un espacio donde se intenta fomentar el reencuentro, el contacto con los demás para coger fuerzas en la lucha, ya que el dolor por perder a un ser querido, aunque no sea tan desgarrador como al principio, seguirá estando siempre ahí. Las reuniones son bimensuales, dando comienzo en febrero, y son coordinadas por tres madres que perdieron a sus hijos y que, después de elaborar sus respectivos duelos, se han ofrecido con gran generosidad como voluntarias, para lo cual siguen un itinerario de formación continua y poder así ayudar con profesionalidad a otras personas en su misma situación.

(Iglesia en Zamora)

Fuente:: SIC

Leer mas http://www.agenciasic.com/2014/01/21/el-centro-de-escucha-san-camilo-en-zamora-ayuda-a-superar-el-duelo-tras-una-muerte/

IV GRAN GALA DE LA ZARZUELAEl próximo sábado 25 de enero, a las 20:30 horas, tendrá lugar, en el Teatro Quijano de Ciudad Real, la IV Gran Antología de la Zarzuela, bajo la dirección de Francisco Antonio Moya y en apoyo a los misioneros de Ciudad Real

Esta IV Antología de la Zarzuela está organizada por la Orquesta Filarmónica de La Mancha, con la colaboración del Ayuntamiento de Ciudad Real. En el concierto, participará el Coro Mansil Nahar de Manzanares, la Coral Polifónica de Ciudad Real y la Coral Sierra Alta de Villarrubia de los Ojos, siempre bajo la dirección de Francisco Antonio Moya Rubio. 

Las entradas para asistir al concierto puedes adquirirse en CCM Activa a través de internet, solicitándolo en el número de teléfono 902 405 902 o directamente en el Teatro Quijano, en el horario habitual para la venta de entradas del recinto.

Fuente:: SIC

Leer mas http://www.agenciasic.com/2014/01/21/gran-antologia-de-la-zarzuela-un-concierto-solidario-con-los-misioneros-de-ciudad-real/

Ladrones de humanidadMons. Jesús Sanz     Acaba de ser estrenada en las pantallas españolas una película llena de mensaje: La ladrona de libros. Está basada en la novela homónima de Markus Zusak (2005) y reconstruye las pequeñas historias anónimas dentro de la gran historia conocida. En medio de una guerra cruel, se desliza un relato de humanidad verdadera. Tiene como trasfondo la barbarie nazi de la II Guerra mundial. Las pinceladas gruesas del sinsentido totalitario están suficientemente sugeridas por el ataque a la dignidad de la persona, a su misma existencia puesta en tela de juicio, en virtud de la ideología que un loco enloquecedor pudo llevar a cabo con el incomprensible aplauso y adhesión de casi todo un pueblo cegato.

Quedan también indicados algunos rasgos menores que igualmente describen aquella tremenda tragedia que se llevó por delante a tantas personas en nombre de la nada más vacía. Allí aparece el miedo, la violencia, la mentira, la demagogia, la envidia, la conspiración, la huida. Pero en medio de toda esta descripción terrible a la que nunca nos acostumbramos ni ante la que nos resignaremos, aparece esa historia pequeña que como un inmenso contrapunto es capaz de ganar la batalla contra toda esperanza, porque el amor es más fuerte que la muerte, como dice con belleza provocativa el libro del Cantar de los cantares.

Hay tres historias de amor sencillo, lleno de verdad y ternura, de esa ternura que salvará el mundo, como decía el gran escritor y teólogo ruso Pavel Evdokimov. En primer lugar está el amor de una familia, que dentro de su extrema precariedad hacen sitio en su pobre hogar para que pueda venir a vivir con ellos una niña. La ternura de quienes tuvieron que hacer de papá y mamá prestados, aún dentro de sus matices temperamentales diversos, es una flor que de pronto pinta de color aquel desierto oscurecido por un grisáceo cenagal. Es también el amor de dos niños, Liesel y Rudi, que en su pureza sin ambigüedad, son capaces de acompañarse con sus sueños y juegos infantiles por encima de las pesadillas trágicas de los adultos. Es en fin, el amor de la niña protagonista, Liesel, a las letras, las palabras, los libros que rescata o toma prestados, con lo que día a día ella va escribiendo su propia biografía en el libro de la vida inacabada. Es una constante en la historia de los humanos, que los amigos de las barbaries, de la violencia, son también enemigos de la vida y de la verdadera cultura. Ejemplos tenemos bien cercanos.

Pero hay una escena particularmente significativa que me conmovió y que viene a ser una clave del encanto de esta película. Están deteniendo los soldados nazis a un pobre hombre judío. Era del pueblo, vivía en aquella calle del Cielo (Himmelstrasse), había nacido allí y todos le conocían y apreciaban. Pero por el hecho de ser judío quedó manchada su condición alemana, y los bárbaros decidieron eliminarlo. Es entonces cuando entra en acción el papá de Liesel para salir en su defensa como un sencillo conciudadano. La brutal agresión que él sufre por este gesto le tira por los suelos, le golpea la cabeza. ¿Por qué lo han hecho? Y esta es la respuesta que se da: porque les ha recordado su humanidad.

Es tremenda la escena por su calidad humana y por su violencia a la vez: recordar la belleza, la bondad, la verdad para las que hemos nacido, puede ser revolucionario. Y así lo sufren tantas personas censuradas, perseguidas y eliminadas, así lo sufren los cristianos. Recordar la humanidad de la que estamos hechos es un modo de testimoniar al Creador que nos hizo sin renunciar al destino que Él nos ha dado.

+ Fr. Jesús Sanz Montes, ofm

Arzobispo de Oviedo

Fuente:: Mons. Jesús Sanz

Leer mas http://www.agenciasic.com/2014/01/21/ladrones-de-humanidad/

Ladrones de humanidadMons. Jesús Sanz     Acaba de ser estrenada en las pantallas españolas una película llena de mensaje: La ladrona de libros. Está basada en la novela homónima de Markus Zusak (2005) y reconstruye las pequeñas historias anónimas dentro de la gran historia conocida. En medio de una guerra cruel, se desliza un relato de humanidad verdadera. Tiene como trasfondo la barbarie nazi de la II Guerra mundial. Las pinceladas gruesas del sinsentido totalitario están suficientemente sugeridas por el ataque a la dignidad de la persona, a su misma existencia puesta en tela de juicio, en virtud de la ideología que un loco enloquecedor pudo llevar a cabo con el incomprensible aplauso y adhesión de casi todo un pueblo cegato.

Quedan también indicados algunos rasgos menores que igualmente describen aquella tremenda tragedia que se llevó por delante a tantas personas en nombre de la nada más vacía. Allí aparece el miedo, la violencia, la mentira, la demagogia, la envidia, la conspiración, la huida. Pero en medio de toda esta descripción terrible a la que nunca nos acostumbramos ni ante la que nos resignaremos, aparece esa historia pequeña que como un inmenso contrapunto es capaz de ganar la batalla contra toda esperanza, porque el amor es más fuerte que la muerte, como dice con belleza provocativa el libro del Cantar de los cantares.

Hay tres historias de amor sencillo, lleno de verdad y ternura, de esa ternura que salvará el mundo, como decía el gran escritor y teólogo ruso Pavel Evdokimov. En primer lugar está el amor de una familia, que dentro de su extrema precariedad hacen sitio en su pobre hogar para que pueda venir a vivir con ellos una niña. La ternura de quienes tuvieron que hacer de papá y mamá prestados, aún dentro de sus matices temperamentales diversos, es una flor que de pronto pinta de color aquel desierto oscurecido por un grisáceo cenagal. Es también el amor de dos niños, Liesel y Rudi, que en su pureza sin ambigüedad, son capaces de acompañarse con sus sueños y juegos infantiles por encima de las pesadillas trágicas de los adultos. Es en fin, el amor de la niña protagonista, Liesel, a las letras, las palabras, los libros que rescata o toma prestados, con lo que día a día ella va escribiendo su propia biografía en el libro de la vida inacabada. Es una constante en la historia de los humanos, que los amigos de las barbaries, de la violencia, son también enemigos de la vida y de la verdadera cultura. Ejemplos tenemos bien cercanos.

Pero hay una escena particularmente significativa que me conmovió y que viene a ser una clave del encanto de esta película. Están deteniendo los soldados nazis a un pobre hombre judío. Era del pueblo, vivía en aquella calle del Cielo (Himmelstrasse), había nacido allí y todos le conocían y apreciaban. Pero por el hecho de ser judío quedó manchada su condición alemana, y los bárbaros decidieron eliminarlo. Es entonces cuando entra en acción el papá de Liesel para salir en su defensa como un sencillo conciudadano. La brutal agresión que él sufre por este gesto le tira por los suelos, le golpea la cabeza. ¿Por qué lo han hecho? Y esta es la respuesta que se da: porque les ha recordado su humanidad.

Es tremenda la escena por su calidad humana y por su violencia a la vez: recordar la belleza, la bondad, la verdad para las que hemos nacido, puede ser revolucionario. Y así lo sufren tantas personas censuradas, perseguidas y eliminadas, así lo sufren los cristianos. Recordar la humanidad de la que estamos hechos es un modo de testimoniar al Creador que nos hizo sin renunciar al destino que Él nos ha dado.

+ Fr. Jesús Sanz Montes, ofm

Arzobispo de Oviedo

Fuente:: Mons. Jesús Sanz

Leer mas http://www.agenciasic.com/2014/01/21/ladrones-de-humanidad/

373377_175709644041_1112772120_n-e1325068884465La Comisión Permanente del Secretariado Nacional del Movimiento de Cursillos de Cristiandad (MCC) de España se reunió en su sede de Madrid el pasado día 18 de enero de 2014.

Durante el evento, presidido por D. Álvaro Martínez Moreno, Presidente Nacional del MCC, con la presencia de Mons. Ángel Rubio Castro, Obispo de Segovia y Consiliario Nacional, así como con varios representantes del Movimiento, se trataron diferentes temas sobre el funcionamiento y desarrollo de éste en las diferentes diócesis españolas, los proyectos en marcha para llevar el Primer Anuncio del Evangelio dentro del marco de la Nueva Evangelización de la Iglesia, así como  la preparación del próximo encuentro a nivel nacional de Responsables de Jóvenes del MCC que se celebrará en Madrid los próximos días 7, 8 y 9 de febrero.

La reunión finalizó con la celebración de la Eucaristía. El Movimiento de Cursillos de Cristiandad es un Movimiento eclesial de difusión mundial que actúa en el interior de la Iglesia Católica, sintiéndose llamado a participar activamente en la gran misión de la evangelización. Su finalidad  apostólica consiste en llevar la fe cristiana a los diferentes ambientes de la vida, mediante una específica “metodología kerigmática” que consta de tres tiempos: Precursillo, Cursillo y Postcursillo. Los temas y los contenidos se basan en los preceptosfundamentales del Credo de nuestra fe católica: Jesucristo, la gracia, los sacramentos, la iglesia,el apostolado, la profundización en las verdades de fe y las experiencias y vivencias de fe.

(MCC España)

Fuente:: SIC

Leer mas http://www.agenciasic.com/2014/01/21/reunion-de-la-comision-permanente-del-secretariado-nacional-de-cursillos-de-cristiandad/

Cordero de DiosMons. Demetrio Fernández    La presentación de Jesús por parte de Juan el Bautista es ésta: “Este es el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo” (Jn 1,29). Estamos acostumbrados a oírla, pero vale la pena detenerse a profundizar en su significado.

En la relación con Dios existe por parte del hombre el deseo de unión con Dios, y en ese contexto se sitúan los sacrificios. Es decir, presentarle a Dios de lo nuestro para que él lo bendiga y podamos así participar de sus bienes. Es muy frecuente en la historia de las religiones presentar a Dios un cordero, como fruto escogido del propio rebaño, y ofrecerlo en sacrificio, o destruyendo la víctima en honor de Dios, o santificándola para comerla en su nombre u ofreciéndola como reparación por los propios pecados.

En la religión judía el cordero ocupa un lugar especial, porque la fiesta principal judía consiste en comer un cordero, celebrando la pascua, la liberación por parte de Dios del pueblo elegido, y al mismo tiempo ese cordero es punto de encuentro de todos los comensales en la comunión fraterna. Más tarde los musulmanes tomarán también un cordero para su fiesta principal, la del sacrificio de Abrahám que estuvo dispuesto a ofrecer a su hijo Isaac, sustituido por un cordero.

El cordero forma parte del mundo de los sacrificios, es símbolo de perdón, de comunión, de ofrenda sacrificial de lo nuestro a Dios. Cuando Juan el Bautista presenta a Jesús como el “Cordero de Dios” está presentando la mejor ofrenda que en su día podremos hacer a Dios, el rescate por nuestros pecados y delitos, la comunión de vida con Dios que se acerca hasta nosotros.

Jesús es presentado desde el principio como el que viene a quitar el pecado del mundo. La separación más profunda del hombre con respecto a Dios se introdujo en el paraíso, cuando Adán y Eva pecaron desobedeciendo a Dios y sus mandatos. Rompieron con Dios y prefirieron seguir su propio camino, que conduce a la perdición. Todos nacemos en pecado, y además pecamos personalmente. Es decir, hemos roto con Dios tantas veces. ¿Y nadie podrá resolver esa ruptura, que nos lleva a la ruina?

Jesucristo es presentado como el que viene a curar esa fractura. El es el Hijo de Dios, que se ha hecho hombre como nosotros. Ya en su persona se da esta unión admirable de Dios y el hombre. Y su tarea, su misión redentora será la de traernos a Dios como Padre misericordioso, y presentarnos ante su Padre como hijos, haciéndonos hermanos suyos. En Cristo confluye ese deseo de Dios, que busca al hombre para hacerle partícipe de sus dones, de su vida, de su felicidad. Y en Cristo nos encontramos representados ante el Padre, pagando él por nosotros la deuda inmensa de nuestros pecados, con que hemos ofendido a Dios.

“Este es el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo”. La ruptura del pecado no se arreglará con palabras, sino con la ofrenda de este Cordero, que pone su vida en rescate por la multitud. La salvación del mundo, de todos los hombres, alcanza su culmen dramático en la pasión redentora de Jesús, que ofreciendo su vida humana en la cruz, nos alcanza vida eterna de hijos a todos nosotros. Pero Jesús ya comienza su vida con esta conciencia. Se pone en la fila de los pecadores para participar de su suerte, como inocente, y para hacerles partícipes de su condición de Hijo, dándoles su Espíritu Santo.

La curación del pecado lleva consigo sangre, dolor, muerte, para deshacer lo mal hecho y para restaurar lo que ha quedado roto. La muerte y todo lo que le rodea ha sido asumido por el Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo. De esta manera, lo que era nuestra ruina se ha convertido en nuestro remedio medicinal, gracias a este Cordero de Dios envuelto en Espíritu Santo.

Ya los primeros pasos de Jesús en su vida pública señalan el programa: ha venido a buscar a los pecadores, y por ellos dará la vida en la cruz. Este es el Cordero que Dios nos da, es el Cordero que por su sacrificio nos restablece la unión con Dios, es el Cordero que paga con su sangre todos nuestros delitos, es el Cordero que comemos en la comunión y nos hace hermanos. “Yo lo he visto”, nos dice el apóstol Juan. La experiencia directa de este encuentro es el mejor aval para dar testimonio, y en esto consiste la evangelización.

Recibid mi afecto y mi bendición:

+ Demetrio Fernández,

Obispo de Córdoba

Fuente:: Mons. Demetrio Fernández

Leer mas http://www.agenciasic.com/2014/01/21/cordero-de-dios/

Mons. MurguiMons. Jesús Murgui    Ser sensibles y responder ante las situaciones de pobreza y fragilidad que se viven en el mundo, reconociendo en ellas al Cristo sufriente, es una llamada profunda y continuada que nos viene desde el Evangelio y que nos recuerda de formas diversas el Santo Padre Francisco en su reciente Exhortación Apostólica Evangelii Gaudium, “La Alegría del Evangelio”.

“Manos Unidas” en su Campaña Contra el Hambre de este año 2014, nos ofrece una magnífica oportunidad de ayudar ante estas situaciones, con un lema sumamente sugerente y oportuno: “Un mundo nuevo, proyecto común”. Una invitación clara a trabajar unidos por un mundo nuevo, como proyecto integrador, construido desde el amor.

Lo dramático en estos tiempos, no sólo es la persistencia de viejas y nuevas pobrezas en el mundo que vivimos, sino que ante tantas situaciones que “claman al cielo” vivimos en una fortísima dinámica de fragmentación social y de contraposición, de guerras, más o menos encubiertas, donde prima el más feroz individualismo, la
lucha pura y dura por los intereses o las ideas (que a veces son sólo revestimiento de intereses) de cada uno o de cada colectivo, con escasa capacidad de integrar, de sumar, de unir.

Si importante es la meta necesaria: erradicar pobrezas, remediar injusticias y fragilidades. No es menos importante el camino, la unión de personas con sensibilidades distintas, la suma de esfuerzos, la forja de una civilización basada en el amor.

El lema de este año: “Un mundo nuevo, proyecto común” está profundamente presente desde el inicio en un Movimiento con hermoso nombre, “Manos Unidas”, que indica el camino y que tiene como fin ser Campaña contra el Hambre, contra la pobreza y la fragilidad de tantos seres humanos, hermanos nuestros.

Quiero dar las gracias a todos aquellos que en nuestra Iglesia diocesana de Orihuela-Alicante entregan sus personas a tan hermoso fin y hacen posible la presencia y tarea de “Manos Unidas” en nuestra tierra, en las parroquias de nuestros pueblos y ciudades.

Les animo a trabajar con ilusión y renovada creatividad y empeño, especialmente en unas circunstancias de crisis económica y de crisis de humanidad en esta sociedad, que pueden crear la tendencia fatal de encerrarnos en nuestras necesidades dejando a su suerte a quienes por no tener, no tienen ni crisis.

Pido a todos los miembros de nuestra diócesis y a las personas de buena voluntad, que no sólo ayudemos con generosidad en la Campaña de este año, sino que ésta sirva también para sensibilizarnos en una tarea cotidiana de erradicar pobrezas, de ayudar fragilidades, y de crear para ello, día a día, entre nosotros un Mundo Nuevo,
hecho de unión, de respeto, de educación en la complementariedad, de destierro de odios, fracturas sociales y enfrentadas divisiones, haciendo realidad en una civilización del amor las palabras de Isaías: “De las espadas forjarán arados” (Is 2,4). Unamos nuestras manos por una civilización nueva.

+Jesús Murgui

Obispo de Orihuela-Alicante

Fuente:: Mons. Jesús Murgui Soriano

Leer mas http://www.agenciasic.com/2014/01/21/un-mundo-nuevo-proyecto-comun/

Mons. Carlos EscribanoMons. Carlos Escribano     El Plan diocesano de Pastoral pretende dinamizar la acción evangelizadora de la comunidad diocesana. Estamos desarrollando los dos objetivos planteados para este curso, la pastoral juvenil y la pastoral en los pueblos pequeños, sin dejar de atender a las propuestas que surgieron el año pasado en el que trabajamos cuestiones referentes al primer anuncio del evangelio dentro de la nueva evangelización.

El Papa Francisco nos habla de la pastoral juvenil en la Evangelii Gadium: “La pastoral juvenil, tal como estábamos acostumbrados a desarrollarla, ha sufrido el embate de los cambios sociales. Los jóvenes, en las estructuras habituales, no suelen encontrar respuestas a sus inquietudes, necesidades, problemáticas y heridas. A los adultos nos cuesta escucharlos con paciencia, comprender sus inquietudes o sus reclamos, y aprender a hablarles en el lenguaje que ellos comprenden. Por esa misma razón, las propuestas educativas no producen los frutos esperados” (EvG 105). Todos somos conscientes de esta realidad que describe el Papa. Anunciar el evangelio hoy a los jóvenes se nos hace harto complicado. Y esto ocurre en el seno de las familias, en los colegios de inspiración cristiana, en las catequesis parroquiales o en los grupos que intentar acompañarles después de culminar la iniciación cristiana.

Asumir este reto nos descubre la necesidad de seguir formándonos para poder afrontarlo. La formación nos mueve a desinstalarnos de lo ya sabido, a buscar nuevos caminos con audacia y esperanza y a vencer la inercia del desánimo. La formación es uno de los grandes retos pendientes a la hora de afrontar la nueva evangelización. En este contexto, el Instituto diocesano de Estudios Teológicos San Joaquín Royo, ha organizado la tradicional semana de formación teológica en la doble propuesta para sacerdotes y para seglares. Para los primeros será los días 28 y 29 de Enero y para los seglares del 27 al 30 del mismo mes. El tema: “Como trasmitir la fe a los jóvenes hoy”. Nos acompañarán especialistas en pastoral juvenil de las diócesis de Zaragoza y de Valencia.

El Papa nos recuerda que todos somos responsables de la evangelización de los jóvenes de nuestras diócesis: “Aunque no siempre es fácil abordar a los jóvenes, se creció en dos aspectos: la conciencia de que toda la comunidad los evangeliza y educa, y la urgencia de que ellos tengan un protagonismo mayor” (EvG 106). Somos responsables, incluso aunque en nuestras parroquias no tengamos muchos o ninguno. No es labor de unos pocos, es de todos, y a ella deberemos responder de manera diversa de acuerdo con nuestras circunstancias pastorales.  Francisco hace una segunda indicación que también es válida para todos: hay que dar a los jóvenes un protagonismo mayor. Ellos son los mejores evangelizadores de los otros jóvenes.   “¡Qué bueno es que los jóvenes sean «callejeros de la fe», felices de llevar a Jesucristo a cada esquina, a cada plaza, a cada rincón de la tierra!” (EvG 106).

Os animo a aprovechar estas jornadas de formación para buscar nuevos caminos de evangelización de nuestros jóvenes. Y pidamos al Señor por ellos y sus familias para que entre todos les sepamos presentar el rostro amoroso de Dios y ellos, a su vez,  lo trasmitan a los demás jóvenes.

+ Carlos Escribano Subías,
Obispo de Teruel y de Albarracín

Fuente:: Mons. Carlos Escribano Subías

Leer mas http://www.agenciasic.com/2014/01/21/curso-de-formacion-para-sacerdotes-y-seglares-como-transmitir-la-fe-a-los-jovenes-hoy/

Mons. Jaume PujolMons. Jaume Pujol      Hace años, cuando viajábamos por algunas capitales europeas o americanas, nos llamaba la atención la variación de razas que se veían por las calles. Hoy la emigración es un fenómeno normal. Se habla de extranjeros, para entendernos, pero en cambio se ha desterrado prácticamente la palabra “forasteros”. Creo que en un mundo global nadie puede ser considerado “de fuera”, y esto es positivo.

A pesar de todo, sigue habiendo discriminaciones no sólo por razón de raza, sino también de pobreza, de género y de otras clases. Basta considerar que el número de personas emigrantes y refugiadas ha aumentado en los últimos años, consecuencia de las hambrunas y de las guerras.

El papa Francisco pone de relieve esta realidad en su Mensaje para la Jornada Mundial del Emigrante y del Refugiado que celebramos este domingo.

Es una realidad con dos caras: por una parte, el tráfico de personas, la explotación, el dolor y la muerte; por otra, la solidaridad, la comprensión, la acogida, la fraternidad. Estos últimos son valores cristianos, de quienes ven en el rostro de cada persona el rostro de Cristo.

Europa es un continente que durante siglos no fue ajeno a la explotación de recursos del Tercer Mundo; su tráfico de esclavos se inscribe en las horas más negras de su historia. A la vez es hoy, pese a la situación de crisis, el paraíso en el que sueñan muchas personas, africanos, asiáticos y latinoamericanos.

La “cultura del encuentro” de que habla el Papa, debe luchar contra la “cultura del rechazo” que con frecuencia se instala también en nuestras sociedades. Hay grupos, por fortuna pequeños, de extrema derecha o de otras ideologías xenófobas, que ven al emigrante o refugiado como alguien que viene a disputarnos el pan que necesitamos.

En un mundo cada vez más sin fronteras, perduran las fronteras mentales. Para cambiar esta percepción, el lema de la Jornada es: “Emigrantes y refugiados, hacia un mundo mejor”.  La experiencia de muchos países muestra que la emigración es al fin una riqueza en todos los sentidos.

Pero no podemos valorar el fenómeno migratorio con parámetros de riqueza material y beneficio, sino de acogida fraternal al otro. El necesitado no es un problema, es un hermano, y hemos de acogerlo en el amor con que amamos a Jesucristo, quien resumió los mandamientos en el doble mandato del amor.

+ Jaume Pujol Bacells

Arzobispo de Tarragona y primado

Fuente:: Mons. Jaume Pujol

Leer mas http://www.agenciasic.com/2014/01/21/no-es-un-problema-es-un-hermano/